El lunes comenzamos la semana con un viaje a uno de los lugares más idílicos de la isla, Valldemossa, nos llamaron hace varios meses para invitarnos a colaborar con la Fundación Coll Bardolet, todo hay que decirlo, para nosotros hasta ese momento, un pintor desconocido… nos enseñaron su obra y nos explicaron su vida, su inspiración… asimilamos rápidamente tanto sus trazos como su colorido…ese colorido que nos hizo quedarnos aquí en Mallorca, esos parajes…
Esa misma semana fuimos a Sa Foradada, seguro que esa belleza de paisajes le sirvieron a él de inspiración, él lo tradujo en su obra pictórica y nosotras en nuestras creaciones, verdes y azules en todas sus tonalidades, desde el turquesa al índigo según te adentres en las aguas de Mallorca…
Entregábamos lo que pensamos que encajaba más en ese espacio…y orgullosas de tener un huequito en un lugar tan privilegiado y preguntándonos si el pintor en cuestión se hubiera alegrado de tenernos en su fundación.
En la tarde del lunes nos llegaba la invitación del Espai Lluc Fluxà, esta galería en estos momentos acoge una colección de bordados dignos de ser analizados durante horas… cada bordado cuenta una historia, bucear en ellos y pensar en esas manos pacientes y maestras en la técnica…que les pasaría por la cabeza a esas señoras? se reunirían a bordar como nos reunimos nosotras a tejer…?
Mañana jueves el Loving-club del ganchillo se unirá a la Galería y rendirá homenaje a esas mujeres y de manera extensiva a todas las mujeres...
Otros tiempos, tiempos antiguos, Coll Bardolet, las bordadoras de Can Bonet… qué pensarían uno y otras de habernos conocido?… quien sabe, quizás desde donde estén nos echen un guiño de complicidad!
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